Recuperaciуn e intimidad: cerrar la brecha

Tilly sigue en movimiento, dando grandes pasos hacia el sofб de mi consultorio. Hace esta incуgnita a un lado, como a al ligera, pero cuando pasa junto a mн noto un destello de acusaciуn en su mirada. En su mano izquierda, un anillo de compromiso lanza su brillo propio, y yo tengo una intensa corazonada de porquй concertу la cita. Han pasado ocho meses desde la ъltima vez que la vi, y hoy se la ve mejor que nunca: sus cбlidos ojos castaсos brillan y su hermoso cabello castaсo-rojizo de ondas suaves parece mбs largo y con mбs cuerpo de lo que yo recordaba. Su rostro tiene la misma atracciуn dulce, casi como el de una gatita, pero las dos expresiones entre las que una vez alternу en forma crуnica – la de huerfanita triste y la de mujer mundana - han sido reemplazadas por un femenino resplandor de confianza. Ha recorrido un largo camino en los tres aсos que pasaron desde su intento de suicidio, cuando terminara su romance con Jim, el policнa casado.

Me alegra ver que su proceso de recuperaciуn todavнa continъa. Tilly aъn no lo sabe, pero incluso los problemas sexuales que se le presentan ahora forman parte del inevitable proceso de recuperaciуn.

- Bueno, tengo a un hombre maravilloso en mi vida. їRecuerda a Hal? Estaba saliendo con йl la ъltima vez que vine.

Recuerdo muy bien ese nombre, habнa sido uno de los varios jуvenes con los que salнa Tilly al dejar la terapia. “Es agradable, pero un poco aburrido” habнa dicho entonces. “Conversamos mucho y me parece sуlido y confiable. Tambiйn es apuesto, pero no hay fuegos artificiales, asн que supongo que no es el hombre adecuado”. En aquel momento, Tilly habнa estado de acuerdo conmigo en que necesitaba ejercitarse en el hecho de estar con un hombre considerado y confiable, de modo que decidiу seguir viйndolo por un tiempo, “sуlo para practicar”.

- Es muy distinto de la clase de hombres con los que solнa involucrarme, gracias a Dios, y estamos comprometidos para casarnos en septiembre... pero, bueno, tenemos algunos problemas. No nosotros, en realidad; soy yo. Me cuesta excitarme de verdad, y como eso nunca fue un problema para mн, quiero saber quй sucede. Usted sabe cуmo era yo. Prбcticamente rogaba tener relaciones sexuales con cada uno de aquellos hombres que nunca me amaron, pero como ya no me arrojo a los brazos de nadie, parezco una solterona mojigata e inhibida. Allн estб Hal, apuesto, responsable, confiable, y realmente enamorado de mн. Y yo estoy en la cama con йl, sintiйndome como un pedazo de madera.

Yo asiento, pues sй que Tilly estб enfrentando un obstбculo que la mayorнa de las mujeres que aman demasiado deben superar cuando se recuperan. Habiendo utilizado su sexualidad como herramienta para manipular a un hombre difнcil e imposible y lograr que las amara, una vez eliminado ese desafнo no saben ser sexuales con una pareja que las quiere.

La aflicciуn de Tilly es evidente. Se golpea la rodilla suavemente con el puсo, enfatizando casi cada palabra.

- їPor quй no me puedo excitar con йl? – Entonces deja de golpearse la rodilla y me mira con temor - їEs porque no lo amo de verdad? їEs eso lo que pasa con nosotros?

- Creo que sн, pero estoy confundida porque todo es muy distinto de lo que conocн antes. Me gusta mucho estar con йl. Podemos hablar de cualquier cosa. Йl conoce toda mi historia, de modo que no hay secretos entre nosotros. No finjo nada con йl. Soy completamente yo misma, lo que significa que con йl estoy mбs relajada de lo que estuve jamбs con otro hombre. Ahora no actъo, lo cual es estupendo, pero a veces aquellas actuaciones eran mбs fбciles que el solo hecho de relajarme y confiar en que bastarб con mostrarme tal como soy para mantener el interйs de alguien.

“ Tenemos muchos gustos en comъn: navegar, pasear en bicicleta e ir de excursiуn. Compartimos principios casi idйnticos, y cuando discutimos, йl sabe pelear limpio. En realidad, es casi un placer discutir con Hal. Pero al principio incluso las charlas abiertas y francas que tenнamos sobre las cosas en que no coincidнamos me asustaban. Yo no estaba acostumbrada a que alguien fuera tan honesto y franco sobre lo que sentнa ni a que esperara que yo hiciera lo mismo. Hal me ayudу a no tener miedo de decir lo que pensaba o a pedirle lo que necesitaba de йl, porque nunca me ha castigado por ser honesta. Siempre terminamos llegando a un acuerdo y sintiйndonos mбs unidos. Es el mejor amigo que yo haya tenido, y me enorgullece que me vean con йl. Por eso, sн, pienso que lo amo, pero si estoy enamorada de йl,

ї por quй no puedo estar bien con йl en la cama? Tampoco hay nada malo en su forma de hacer el amor. Es muy considerado, realmente quiere complacerme. Eso es muy nuevo para mн. No es tan agresivo como era Jim, pero no creo que eso sea el problema. Yo sй que йl piensa que soy maravillosa, y se excita mucho conmigo, pero por mi parte no pasa mucho. Gran parte del tiempo me siento frнa y avergonzada. Sabiendo cуmo era yo antes, no tiene mucho sentido, їno cree?

- En realidad, Tilly, tiene mucho sentido. Lo que te estб pasando es algo que muchas mujeres con antecedentes similares a los tuyos, y que han logrado recuperarse, enfrentan cuando empiezan a relacionarse con un hombre que es una pareja adecuada. La excitaciуn, el desafнo, el viejo nudo en el estуmago simplemente no estбn mбs, y dado que es asн como siempre han sentido el “amor”, temen que les falte algo muy importante. Lo que falta es la locura, el dolor, el miedo, la espera y la ilusiуn.

“ Ahora, por primera vez tienes a un hombre agradable, seguro y confiable que te adora, y no tienes motivos para tratar de cambiarlo. El ya tiene las cualidades que buscabas en un hombre, y se ha comprometido contigo. El problema es que tъ nunca experimentaste el hecho de tener lo que querнas. Sуlo conociste cуmo era el no tenerlo, y esforzarte con locura para conseguirlo. Estбs acostumbrada al anhelo y al suspenso, lo cual crea una excitaciуn muy fuerte. їLo harб йl, o no lo harб? їLo hace o no lo hace? Tъ sabes a quй me refiero.

- Demasiado bien. Pero, їcуmo se relaciona todo esto con mis sentimientos sexuales?

- Se relaciona porque el hecho de no tener lo que quieres es mucho mбs estimulante que el tenerlo. Un hombre bueno, que te quiere y se dedica a ti nunca harб fluir tu adrenalina como lo hacнa Jim, por ejemplo.

- ЎOh, es verdad! Siempre estoy cuestionando toda la relaciуn porque no estoy obsesionada con Hal. A veces me he preguntado si no estarнa demasiado segura de йl.

Tilly ya no estб enojada. Ahora estб entusiasmada, como un detective que estб descifrando un importante misterio.

- Bueno, es probable que sн lo tomes por seguro en cierta medida. Sabes que йl estarб allн cuando lo necesites. No va a abandonarte. Puedes contar con йl. Entonces no hay necesidad de obsesionarte. La obsesiуn no es amor, Tilly. Es sуlo obsesiуn.

- Y a veces – prosigo -, el sexo funciona muy bien cuando estamos obsesionadas. Todos esos intensos sentimientos de excitaciуn y ansioso deseo, incluso temor, contribuyen a un poderoso conjunto que llamamos amor. En realidad, es cualquier cosa menos eso. Aun asн eso es lo que nos dicen todas las canciones sobre el amor. Eso de “No puedo vivir sin ti, nena”. Casi nadie escribe canciones sobre la calma y la comodidad de una relaciуn amorosa sana. Todos escriben sobre el miedo, el dolor, la pйrdida y el sufrimiento. Entonces llamamos a eso amor, y no sabemos que hacer cuando aparece algo que no es una locura. Empezamos a relajarnos y luego tememos que no sea amor, porque no estamos obsesionadas.

- Exactamente. Eso es exactamente lo que pasу. Al principio no lo llamй amor porque era demasiado sosegado, y yo no estaba acostumbrada a que nada lo fuera, como usted sabe. – Sonrнe y continъa -: Simplemente йl creciу en mн durante los meses en que nos vimos. Yo sentнa que podнa relajarme y mostrarme tal como era y que aun asн йl no se irнa. Esperamos mucho tiempo antes de tener relaciones sexuales; primero llegamos a conocernos como personas. Йl me agradaba cada vez mбs, y los momentos que pasaba con йl eran buenos y felices para mн. Cuando finalmente nos acostamos juntos fue algo muy tierno, y me sentн muy vulnerable. Llorй mucho. Aъn lo hago a veces, pero a йl no parece molestarle. – Tilly baja la vista -. Supongo que todavнa me vienen muchos recuerdos dolorosos relacionados con el sexo, de verme rechazada y sentirme tan lastimada. –Despuйs de una pausa, agrega -: Ahora, en cuanto al sexo, yo estoy mucho mбs preocupada que йl. A йl le gustarнa que fuese mбs excitante por el bien de ambos, pero en realidad no se queja. Yo sн, porque sй cуmo podrнa ser.

- Estб enamorado de mн. Puedo verlo en la forma en que me trata. Cada vez que conozco a algъn amigo suyo, me doy cuenta de que Hal ya le ha dicho cosas maravillosas de mн por la forma en que me saluda. Y cuando estamos solos, es tan afectuoso, tan ansioso de hacerme feliz. Pero yo me pongo dura, frнa, casi rнgida. Parece que no puedo reaccionar a й. No sй quй me detiene...

- їMiedo, quizбs? – Luego, respondiйndose sн misma, agrega -:Sн, eso es. ЎTengo miedo, mucho miedo!

- No estoy segura. De que me conozca, de alguna manera. Oh, eso suena tan bнblico. Usted sabe cуmo hablan de eso en la Biblia. “Entonces la conociу”. Este tipo de cosas. Pero de alguna manera me siento como si, si se lo permitiera, Hal podrнa conocerme de verdad, no sуlo sexualmente, sino tambiйn de otras maneras. Parece que no puedo rendirme a йl. Me asusta demasiado.

- Oh, Dios, no lo sй. –Tilly empieza a moverse, incуmoda, en la silla –. Me siento tan vulnerable, tan desnuda cuando lo pienso. Me siento tonta al hablar asн del sexo, despuйs de todas mis andanzas. Pero esto es diferente, de alguna manera. No es tan fбcil ser sexual con alguien que realmente quiere estar cerca de mн en todos los aspectos. Me cierro como una almeja o, si no, sigo los movimientos mientras parte de mн se reprime. Actъo como una virgen tнmida o algo asн.

- Tilly – la tranquilizo –. en lo referente a la clase de intimidad que ya tienen tъ y Hal, y a la que pueden tener en el futuro, eres en gran medida virgen. Todo es nuevo, y tienes muy poca experiencia en esta forma de estar con un hombre; con cualquiera, en realidad. Tienes miedo, sн.

- Bueno, asн es exactamente como me siento: autoprotectora, como si fuera a perder algo muy importante – asiente.

- Sн, y lo que temes perder es tu armadura, tu protecciуn contra las heridas verdaderas. Si bien antes te entregabas a los hombres, en realidad nunca te arriesgaste a intimar con ninguno de ellos. Nunca tuviste que ocuparte de la intimidad porque ellos tampoco podнan intimar. Ahora estбs con Hal, que lo que mбs desea es estar cerca de ti en todos los aspectos, y sientes pбnico. Estб bien cuando conversan y disfrutan la compaснa mutua, pero con el sexo, cuando se eliminan todas las barreras posibles entre ustedes, es diferente. Con tus otras parejas, ni siquiera el sexo eliminaba las barreras. De hecho, contribuнa a mantenerlas en su lugar porque tъ utilizabas el sexo para evitar comunicar quiйn eras en realidad y cуmo te sentнas. Por eso, por mбs relaciones sexuales que tuvieras, nunca llegabas a conoceros mбs. Dado que una vez usaste el sexo para controlar las relaciones, creo que te cuesta mucho renunciar a ese control, siendo sexual en lugar de usar el sexo como herramienta.

“ Me agrada tu frase, Tilly, acerca de que te “conozca”, porque eso es lo que significa ahora compartir el sexo. Tъ y Hal han compartido tanto de ustedes mismos que el sexo se ha convertido en una manera de profundizar ese conocimiento mutuo, no de evitarlo.

- ї Por quй tiene que ser asн? їPor quй no puedo relajarme? Sй que este hombre no va a hacerme daсo deliberadamente. Al menos no lo creo... – Cuando oye su propia vacilaciуn, cambia rбpidamente de lнnea -. Estб bien, usted me dice que sуlo sй ser sexy con alguien que no me quiere, al menos no del todo, y que no sй ser sexy con alguien como Hal que es bueno y amable y piensa que soy maravillosa, porque tengo miedo de la intimidad. Entonces, їquй hago?

- La ъnica salida es pasar por ello. En primer lugar, renuncia a la idea de “ser sexy” y permнtete ser simplemente sexual. Ser sexy es una actuaciуn. Ser sexual es relacionarse нntimamente a nivel fнsico. Tendrбs que decir a Hal exactamente lo que te pase y cuando te pase: todos tus sentimientos, por irracionales que sean. Dile cuбndo tienes miedo, cuбndo necesitas apartarte y cuбndo estбs lista para reanudar la intimidad. Si lo necesitas, asume un mayor control del acto sexual y ve tan rбpidamente y tan lejos como te resulte cуmodo. Hal te entenderб si le pides ayuda con tus miedos. Y trata de no juzgar lo que suceda. El amor y la confianza no son бreas en las que hayas tenido mucha experiencia hasta ahora. Estб dispuesta a ir muy lentamente y construye tu voluntad de rendirte. Tъ sabes, Tilly, que para ti, en todas las relaciones sexuales que tuviste antes, habнa muy poca entrega, pero sн mucho manejo y control de la otra persona; lo manipulabas con el sexo, y eras muy obstinada. Estabas actuando, esperando crнticas entusiasmadas. Mira lo que hacнas antes y lo que tratas de hacer ahora como la diferencia entre hacer el papel de gran amante y permitir que te amen. Representar un papel puede ser muy estimulante, especialmente cuando se tiene la atenciуn del pъblico. Permitir que te amen es mucho mбs difнcil porque debe venir de un sitio muy privado, el sitio donde tъ ya te amas. Si allн ya hay mucho amor, es mбs fбcil aceptar que mereces el amor de otra persona. Si hay muy poco amor propio, es mucho mбs difнcil dejar entrar el amor que proviene de fuera de ti. Has avanzado mucho con respecto al amor propio. Ahora estбs en el siguiente paso: confiar lo suficiente como para permitir que este hombre te ame.

- En realidad, todo aquel desenfreno mнo era calculado. Ahora lo veo. En realidad no renunciaba mucho, aunque sн era una actuaciуn estimulante. Por eso ahora tengo que dejar de tratar y empezar a ser simplemente. Es curioso cуmo eso es mбs difнcil. Ser amada... – murmura

Tilly -. Sй que en eso todavнa me falta mucho por recorrer. A veces miro a Hal y me pregunto cуmo puede estar tan encantado conmigo. No estoy segura de tener nada maravilloso cuando no estoy en una actuaciуn espectacular.- Los ojos de Tilly se dilatan -. Eso es lo que lo hacнa tan difнcil para mн, їverdad? No tener que actuar. No tener que hacer nada especial. No tener que tratar. He tenido miedo de amar a Hal porque estaba segura de que no sabнa hacerlo. Creнa que, a menos que cumpliera mi rutina seductora, lo que hiciera con йl no bastarнa y йl se aburrirнa. No podrнa usar la actuaciуn seductora porque йramos tan buenos amigos antes de llegar a ser amantes que era totalmente inapropiado que yo empezara de pronto a jadear y a arrojarme hacia йl. Ademбs, no era necesario. El ya estaba interesado sin que yo hiciera nada de eso.

“Es como el resto de lo que tenemos juntos. Todo es mucho mбs fбcil de lo que pensй que podrнa ser el amor. ЎSуlo basta con ser yo misma! – Tilly se detiene, y luego me mira con timidez -. їVe este tipo de cosas a menudo? – pregunta.

- No con tanta frecuencia como quisiera – respondo –. Lo que estбs enfrentando ahora es sуlo una cuestiуn para una mujer que realmente se ha recuperado de amar demasiado... y la mayorнa de las mujeres no se recuperan. Consumen su tiempo, sus energнas, su vida, usando su sexualidad como herramienta, tratando de convertir a alguien que no es capaz de amarlas en alguien que lo sea. Nunca da resultado, pero es algo inofensivo, porque mientras estйn revueltas en la lucha nunca tienen que ocuparse de la verdadera intimidad, de que otro ser humano llegue a conocerlas en el sentido mбs profundo. Entonces, mientras su soledad las impulsa hacia las relaciones, su miedo las hace elegir a personas con quienes nunca darб resultado.

- Entonces ahora estoy en el otro extremo de esto, soy la que se resiste a la intimidad. Es todo un cambio.

- Sucede muchas veces. Todos tenemos la capacidad de jugar ambos papeles, їsabes? El perseguidor, que es lo que tъ solнas ser, o el distanciador, que es lo que eran tus parejas. Ahora, en cierta medida, tъ eres la distanciadora, la que huye de la intimidad, y Hal el perseguidor. Si tъ dejaras de huir, serнa interesante ver quй sucederнa. Verбs, lo que tenderб a seguir igual es la brecha entre tъ y otra persona. Podrбn cambiar de papel, pero la brecha seguirб constante.

- Entonces, no importa quiйn persiga y quiйn huya, ninguno tiene por quй enfrentarse a la intimidad – observa Tilly. Luego, con suavidad y cautela, agrega -: No es el sexo, їverdad? Es la intimidad lo que asusta. Pero realmente creo que quiero estarme quieta y dejar que Hal me alcance. Me asusta y me parece terriblemente amenazador, pero quiero cerrar la brecha.

Tilly habla de estar dispuesta a entrar – a un nivel de existencia con otra persona que muy poca gente logra. La necesidad de evitarlo subyace a todas las luchas en que se involucran las mujeres que aman demasiado y los hombres que aman demasiado poco. Las posiciones de perseguidor y distanciador son reversibles, pero para que dos personas las eliminen por completo hace falta mucho coraje. Yo les doy el ъnico consejo que puedo ofrecerles para guiarlos en su viaje.

- Bien, te sugiero que hables de esto con Hal. Y no dejen de hablar cuando estйn en la cama. Hazle saber lo que te pasa. Esa es una forma muy importante de la intimidad. Sй muy, muy honesta, y el resto se solucionarб solo.

- Me ayuda muchнsimo entender lo que ha estado pasando. Sй que usted tiene razуn, que todo esto es nuevo para mн y que todavнa no sй hacerlo. Tampoco me ha ayudado pensar que deberнa hacer las locuras que hacнa antes. De hecho, me ha causado mбs problemas. Pero ya confнo en Hal con todo el corazуn y los sentimientos. Ahora necesito confiar en йl con el cuerpo. –Sonrнe, sacudiendo la cabeza. – Nada de esto es fбcil, їverdad? Pero es exactamente lo que debe suceder. Le avisarй cуmo van las cosas... y gracias.

- Ha sido un placer, Tilly. – respondo de corazуn y nos damos un abrazo de despedida.

Para ver cuбnto ha avanzado Tilly en su recuperaciуn, podemos comparar sus creencias sobre sн misma y su estilo de comportarse en una relaciуn нntima con las caracterнsticas de una mujer que se ha recuperado de amar demasiado. No olvide que la recuperaciуn es un proceso de por vida y una meta que luchamos por alcanzar, no que logramos de una vez por todas.

Йstas son las caracterнsticas de una mujer que se ha recuperado de amar demasiado.

1. Se acepta por completo, aъn cuando desea cambiar partes de sн misma. Hay un amor propio y una autoconsideraciуn bбsicos, que ella alimenta con cuidado y expande con decisiуn.

2. Acepta a los demбs tal como son, sin tratar de cambiarlos para satisfacer sus propias necesidades.

3. Estб en contacto con sus sentimientos y actitudes en todos los aspectos de su vida, inclusive la sexualidad.

4. Atesora cada aspecto de sн misma: su personalidad, su apariencia, sus creencias y principios, su cuerpo, sus intereses y logros. Se autoaprueba, en lugar de buscar una relaciуn que le otorgue una sensaciуn de valor propio.

5. Su autoestima es lo suficientemente grande para que pueda disfrutar de la compaснa de los demбs, especialmente de los hombres, que le parecen bien tal como son. No necesita que la necesiten para sentirse digna.

6. Se permite ser abierta y confiada con la gente apropiada. No teme que la conozcan en un nivel personal profundo, pero tampoco se expone a la explotaciуn de quienes no se interesan por su bienestar.

7. Se pregunta: “їEsta relaciуn es buena para mн? їMe permite llegar a ser todo lo que soy capaz de ser?”

8. Cuando una relaciуn es destructiva, es capaz de renunciar a ella sin experimentar una depresiуn incapacitante. Tiene un cнrculo de amigos que la apoyan e intereses sanos que la ayudan a superar la crisis.

9. Valora su propia serenidad por sobre todas las cosas. Todas las luchas, el drama y el caso del pasado han perdido su atracciуn. Se protege a sн misma, su salud y su bienestar.

10. Sabe que una relaciуn, para que funcione, debe darse entre dos personas que compartan objetivos, intereses y valores similares, y que tengan capacidad para la intimidad. Sabe tambiйn que ella es digna de lo mejor que le pueda ofrecer la vida.

Hay varias fases en la recuperaciуn de amar demasiado. La primera fase comienza cuando comprendemos lo que estamos haciendo y deseamos poder detenernos. Luego sigue nuestra voluntad de obtener ayuda para nosotras mismas, seguida de nuestro intento inicial de buscar ayuda. Despuйs de eso, entramos en la fase de la recuperaciуn que requiere el compromiso con nuestra curaciуn y la voluntad de continuar con nuestro programa de recuperaciуn. Durante

este perнodo empezamos a cambiar nuestra forma de actuar, de pensar y de sentir. Lo que una vez nos pareciу normal y familiar comienza a parecernos incуmodo e insalubre. Entramos a la fase siguiente de recuperaciуn cuando empezamos a tomar decisiones que ya no siguen nuestros viejos patrones, sino que realzan nuestra vida y promueven nuestro bienestar. En todas las etapas de la recuperaciуn, el amor propio crece lenta pero firmemente. Primero dejamos de odiarnos; luego los volvemos mбs tolerantes con nosotras mismas. Mбs tarde hay una incipiente apreciaciуn de nuestras cualidades, y luego se desarrolla la autoaceptaciуn. Finalmente, evoluciona el genuino amor propio.

A menos que tengamos autoaceptaciуn y amor propio, no podemos tolerar que nos “conozcan”, como lo expresara tan bien Tilly, porque sin esos sentimientos no podemos creer que somos dignas de ser amadas tal como somos. En cambio, tratamos de ganar amor dбndolo a otra persona, siendo maternales y pacientes, sufriendo y sacrificбndonos, proporcionando una vida sexual excitante o cocinando de maravillas, o lo que sea.

Una vez que la autoaceptaciуn y el amor propio empiezan a desarrollarse y arraigarse, entonces estamos listas para practicar conscientemente el solo hecho de ser nosotras mismas sin tratar de complacer, sin actuar de maneras calculadas para ganar la aprobaciуn y el amor de otros. Pero el hecho de eliminar la actuaciуn, si bien es un alivio, tambiйn puede asustarnos. Cuando nos mostramos como somos en lugar de actuar, nos invade una sensaciуn de torpeza y de gran vulnerabilidad. Al luchar para creer que somos dignas, tal como somos, del amor de alguien que es importante para nosotras, siempre estarб allн la tentaciуn de actuar aunque sea un poquito para йl, y sin embargo, si el proceso de recuperaciуn ha progresado, tambiйn habrб una renuncia a recaer en las viejas conductas y manipulaciones. Esta es la encrucijada que ahora enfrenta Tilly: ya no puede utilizar su viejo estilo de relacionarse sexualmente pero la asusta avanzar hacia una modalidad mбs genuina, menos controlada (habiendo sido su desenfreno anterior una actuaciуn bien controlada) de experiencia sexual. Al principio, el hecho de dejar de actuar nos hace sentir heladas. Cuando ya no estamos dispuestas a hacer las maniobras calculadas para producir un efecto determinado, hay un perнodo de tiempo durante el cual sufrimos por no saber quй hacer hasta que nuestros impulsos genuinos de amar tengan oportunidad de hacerse oнr y sentir para afirmarse.

Renunciar a las viejas estratagemas no significa que nunca nos acerquemos, nunca amemos, nunca atendamos, nunca ayudemos, nunca tranquilicemos ni estimulemos ni seduzcamos a nuestra pareja. Pero con la recuperaciуn, nos relacionamos con otra persona como expresiуn de nuestra propia esencia, no porque tratemos de obtener una respuesta determinada o de crear un efecto o de producir una modificaciуn en йl. En cambio, lo que tenemos para ofrecer es lo que somos de verdad cuando no nos escondemos ni calculamos, cuando estamos sin disfraz y sin maquillaje.

Primero debemos vencer nuestro miedo a ser rechazadas si permitimos que alguien nos vea de verdad, nos conozca de verdad. Luego debemos aprender a no sentir pбnico cuando todas nuestras fronteras emocionales ya no estйn en su lugar, rodeбndonos y protegiйndonos. En el бrea sexual, esta nueva calidad de relaciуn requiere no sуlo que estemos desnudas y vulnerables fнsicamente, sino tambiйn emocional y espiritualmente desnudas y vulnerables.

No es extraсo que este grado de conexiуn entre dos individuos sea tan poco frecuente. Nuestro terror es que sin estas fronteras nos disolveremos.

їQuй hace que el riesgo valga la pena? Sуlo cuando nos revelamos de verdad podemos ser amadas de verdad. Cuando nos relacionamos tal como somos, a partir de nuestra esencia, entonces si nos aman, aman nuestra esencia. Nada es mбs valorable en un nivel personal y mбs liberador en una relaciуn. Sin embargo, cabe destacar que esta clase de comportamiento de nuestra parte sуlo es posible en un clima libre de miedo, de modo que no sуlo debemos vencer nuestros propios miedos a ser genuinas sino tambiйn evitar a las personas cuyas actitudes y conductas para con nosotras nos produzcan miedo. Por dispuesta que se vuelva usted con la recuperaciуn a ser genuina, siempre habrб personas cuya ira, hostilidad y agresiуn inhibirбn su voluntad de ser honesta. Ser vulnerable con ellos es ser masoquista. Por lo tanto, sуlo debemos bajar nuestras defensas y, a la larga, eliminarlas, con personas – amigos, familiares o amantes - con quienes tengamos una relaciуn llena de confianza, amor, respeto y reverencia por nuestra humanidad tierna y compartida.

Lo que sucede a menudo con la recuperaciуn es que, a medida que cambian nuestros patrones de relaciуn, tambiйn cambian nuestros cнrculos de amistades y nuestras relaciones нntimas. Cambiamos en la forma de relacionarnos con nuestros padres y nuestros hijos. Con nuestros padres nos volvemos menos necesitadas y menos iracundas, y a menudo tambiйn menos congraciadoras. Nos volvemos mucho mбs honestas, a menudo mбs tolerantes, y a veces llegamos a tener un afecto mбs genuino. Con nuestros hijos nos volvemos menos controladoras, menos preocupadas y menos culpables. Nos relajamos y los disfrutamos mбs porque somos capaces de relajarnos y disfrutarnos mбs a nosotras mismas. Sentimos mбs libertad para buscar la satisfacciуn de nuestras necesidades e intereses, y eso los deja a ellos en libertad de hacer lo mismo.

Las amigas con quienes una vez pudimos compadecernos sin cesar ahora pueden parecernos obsesivas e indeseables y, si bien podemos ofrecernos a compartir lo que nos ha ayudado, no nos permitiremos cargar el peso de sus problemas. La desdicha mutua como criterio para la amistad es reemplazada por intereses mutuos mбs gratificantes.

En resumen, la recuperaciуn le cambiarб la vida en mбs formas de las que yo pueda predecir en estas pбginas, y a veces eso le resultarб incуmodo. No deje que eso la detenga. El miedo a cambiar, a renunciar a lo que siempre hemos conocido, hecho y sido, es lo que previene nuestra metamorfosis hacia un yo mбs sano, mбs elevado y de un amor mбs genuino.

No es el dolor lo que nos retiene. Ya estamos soportando niveles alarmantes de dolor sin perspectivas de alivio a menos que cambiemos. Lo que nos retiene es el miedo, el miedo a lo desconocido. La mejor manera que conozco de enfrentar y combatir el miedo es unir fuerzas con otras mujeres que estйn en el mismo viaje. Busque un grupo de apoyo formado por esas otras que ya estuvieron donde estб usted y que se dirigen o ya han llegado al destino que usted intenta alcanzar. Ъnase a ellas en el camino hacia una nueva forma de vivir.

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